Vivimos en un mundo que se rige por etiquetas. No somos mas que productos etiquetados. Tenemos que estar definidos o si no no nos sentimos parte de algo. Sabemos que es humillante y, aún así caemos como moscas a la mierda. Además todos nos creemos dignos de juzgar al resto. Como si de nuestra opinión dependiera el destino de quienes no son como nosotros creemos que deberían ser. Es muy fácil señalar, juzgar y condenar. Sabemos que el blanco elegido es fácil. No tenemos en cuenta lo mucho que duele que te cataloguen como a un simple electrodoméstico. O eres una cosa o la otra, nada de mezclas y mucho cuidado con lo que eliges. No vaya a ser que encima sea el "bando" equivocado. El que va a ser apaleado sólo por no querer seguir la norma. ¿Quién demonios dice que las cosas han de ser de una manera o de otra? ¿Quién coño elige como se ha de vivir? Luego se presume de la libertad de expresión, el libre albedrío, el respeto...JA!! Yo me río de eso. Me río y lloro por la cantidad inabarcable e imperante de hipocresía que por desgracia hay en el mundo. La pena es que tod@s aportamos nuestro granito de arena. Tod@s conseguimos que el mundo sea un lugar cada vez peor. Estamos tan obsesionad@s con el contrario que no nos damos cuenta de que no existen CONTRARIOS. En fin, no sé...está todo tan hecho una mierda. Puede sonar pesimista, y seguramente sea así. Pero me cuesta mucho ver la luz al final de este túnel. No consigo ver el ENTENDIMIENTO TOTAL, tampoco sé si existe. Incluso puede que este texto sólo sea una pérdida de tiempo. Es lo más probable, es decir, una causa perdida. Aunque ello no quita para que todo el odio que fluye por el planeta duela profundamente. Palabras, gestos, miradas. El odio está ahí. Y todo porque nos pusieron una etiqueta. Una etiqueta que resultó ser el "error" por el que nos juzgarán y nos condenarán.
Nyah
1 comment:
Tienes mucha razón, al menos eso pienso hoy que tengo un dia pesimista.
Personalmente creo que incluso quienes intentamos saltarnos un poco los estamentos caemos en la trampa una y otra y otra vez. Asi de tontos somos.
Yo personalmente estoy más allá de toda esperanza, el mundo es un asco y bastante suerte tengo de vivir donde vivo, donde aun se puede saltar de puntillas sobre muchas de las etiquetas; el problema no es la cantidad de gente que muere al minuto en el terruño este (desde un punto de vista biologico no queda otra, somos muchos y hay que hacer sitio); el problema estriba en que las razones por las que toda esa gente muere suelen ser las mismas, y las victimas casi siempre de la misma calidad de vida, de la misma posicion social y ubicados mas o menos siempre en el mismo sitio.
Y eso, teniendo en cuenta que somos seres civilizados a los que se nos ha dado cierta capacidad de raciocinio, es inaceptable.
El caso es que somos animales inteligentes que deberian estar usando dicha inteligencia para buscar la razón (si la hay) de la existencia del universo, la vida y todo lo demas, y sin embargo la malgastamos en nuestras mediocres vidas llenas de deseos necios y egoistas. Y todo eso da igual, porque en el momento en que uno se muere, todo se acabó. ¿Que más da entonces lo que hagamos en vida, los valores por los que luchamos, los sueños que perseguimos?
Mira el lado bueno de las cosas, en cuanto nos autodestruyamos y pase un poco de tiempo para que se disipe la contaminacion nuclear, la naturaleza volverá a abrirse camino y el planeta tierra volverá a estar poblado de plantitas y animalillos cuyas unicas etiquetas para con el mundo exterior responden a tres preguntas:
a) ¿Es de mi especie?
b) ¿Se puede comer?
c) ¿Se puede copular?
Ah, eso si es vida. Esta claro que la inteligencia humana es un experimento que ha salido francamente mal.
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