Y de INCÓGNITA

¿Y?
Pregunta para todo tipo de asuntos que no se quieren explicar. Sería la letra perfecta para los políticos que se limitan a cagarla y que no quieren resolver nada de lo que estropean.
¿No se sentirán nunca tan fracasados como para reconocer que han hecho algo mal? Porque es más grave no admitir un error que el verdadero hecho de cometerlo. Además apreciaríamos más su capacidad como dirigentes de nuestros países. Es posible que les diera más credibilidad y se tuviese en cuenta ese factor humano que se olvida tan a menudo. Nos resulta complicado identificarnos con alguien que tiene el poder de un país en sus manos porque nos parece algo muy lejano y, aunque parezca extraño, su humanidad queda relegada a un ínfimo y alejado plano. No sé si esto que aquí escribo tiene algún sentido para quien no sea yo, pero puede ser entendible con algo de medicación. ¡Es broma! Ya ves, soy así de bromista. La verdad es que importa un pomelo si lo entiende alguien o no, el caso es que como yo lo entiendo y lo escribo para mí…pues eso.
Voy a parar en mi explicación de por qué no me importa si nadie más lo entiende o no porque acabaría divagando y complicándolo todo aún más. Y nadie quiere eso, ¿verdad?
Lo único que trato de hacer aquí es lo mismo que hace Dumbledore en Harry Potter y el Cáliz de Fuego, me deshago de algunos pensamientos para poder volverlos a recordar cuando quiera.
Suena estúpido, ¿a qué sí? En fin, pero es verdad, es lo que realmente hago: escribo para no olvidar. Porque me da miedo olvidarme de cosas que son importantes y que quiero que me sigan preocupando. No sé lo que pasará con mi vida pero si algún día perdiese el norte y mis principios en el camino, me gustaría releer estas notas y volver a poner mi cabeza en su sitio. Es una manera de asegurarme. Sería como un “Seguro de Principios”… ¡ay! Vuelvo a empezar a divagar. Bueno más o menos he explicado bien lo que pretendo con esta especie de Diario Electrónico. ¡Uy! Ahora me dedico a catalogar todo lo que hago, ¡tiene gracia!
Y es que encima me encanta escribir, y cuando tengo el día suelto siento como una especie de corriente eléctrica que recorre todo mi cuerpo hasta mis dedos y no puedo parar de teclear, a veces incluso sin demasiado sentido, como ahora, ¡je je! Me siento contenta cuando veo lo que pienso escrito en la pantalla de mi ordenador, es algo muy simple, pero me gusta la sensación de ver que puedo hacer algo que me gusta y que no se me da del todo mal. No es que me esté echando flores ni nada por el estilo, es sólo que en este caso no me infravaloro como lo hago en otras cosas.
Ahora me pregunto: ¿sería capaz de volver a repetir toda esta retahíla de sinsentidos? ¡ja ja ja! Puede que si lo meditase con tranquilidad volviese a escribir todo con las mismas palabras…¡qué va! No lo único que sé con seguridad es que lo pienso ahora y mañana y espero que lo siga pensando dentro de mucho tiempo.

Para terminar: ¿existe la atemporalidad? ¡Quién sabe!

Por siempre atemporal………………………………

Nagore Moreno Rivas